sábado, 16 de abril de 2022

Miedo

Casi no tengo miedo, casi respiro tránquila entra la mascarilla y el aire fresco, entre la paciencia de un futuro no tan gris. 

Casi no lloró,  pero cuando lo hago,  rezo y terminó en - Muchas gracias -. 

Extraño sentir la lluvia en la cara, las reuniones sin sentido y comer sin miedo en la calle. 

Casi no tengo miedo,  extraño a algunos amigos que no veré,  soy consciente que la muerte deambula, entre las sombras a la espera de otras victimas. 

Seremos sobrevivientes de un mundo que no queremos, de un futuro susceptible a continuar sin nosotros, pero estaremos  agradecidos de estar vivos dispuesto a observar al sol. 

viernes, 9 de marzo de 2018

COMPAÑIA


Acomodo su vida a su nueva rutina, ahora tenía un muerto a quien llevarle flores y a quien extrañar. No hubiera querido ser viuda, pero los años y los trajines de la vida se habían llevado a su compañero amado.  
Al principio la pena no le dejaba  continuar y las lágrimas se deslizaban sin querer,  como desahogo de un corazón  partido. Pero el tiempo, que es el mejor remedio,  mitigo la pena. Ahora disfrutaba de las conversaciones en el cementerio, donde le comentaba de las novedades de sus hijos y la travesura de sus nietos. 
- Tu hijo esta muy feliz, con su pequeño hijo- le decía, mientras acomodaba sus flores en uno de sus jarrones.  El viento jugó con su sombrero y ella sonriente fue a buscarlo.
Era él, que siempre jugaba entre las praderas y los campos



martes, 10 de enero de 2017

Sonrisa

A los cuarenta años Sofía se casó.  Su corazón solitario y sombrío, se llenó de luz cuando conoció a  Ricardo, un hombre que no había soñado en su  vida, pero era el mejor  que había conocido, sus detalles y su sonrisa la encandilaron.

Después de muchos años construyó su  hogar, ahora estaba dispuesta a aprender a ser una mujer, a sacrificarse  para llegar a la felicidad  familiar.  Sin embargo, el sino se encargó de regalarle brevemente  aquellos  momentos y llevarse  a Ricardo. Sólo en el rostro de su  pequeña hija encontró consuelo y esa cálida sonrisa que tanto amaba.

viernes, 23 de diciembre de 2016

Tristeza

Miró su foto en la web era perfecta, su nueva vida  se veía igual,  pero en sus ojos  vio su tristeza... entonces le preguntó.
- ¿Estás triste?-
- No...tengo todo lo que siempre quise, estoy casada con un buen hombre, tengo nuevos amigos y conozco nuevos lugares...- dijo con voz confiada, sin olvidad su mirada melancólica.
Pero esa respuesta era obvia igual que su tristeza, tal vez en la lejanía extrañaba algo,  su familia,  sus amigos o  su antiguo mundo. Entonce rezó por ella con la esperanza de que en algún momento  se diera cuenta que estaba triste por alguna razón...

domingo, 13 de noviembre de 2016

Octubre

Eran las cinco de la tarde, había caminando varias cuadras. Cansada me detuve en el único lugar donde podría descasar, la iglesia de las Nazarenas de la avenida Tacna. Su portón  abierto de par a par invitaba a ingresar, camine entre la muchedumbre y los comerciantes y recordé que  el mes morado se había iniciado y algunos feligreses buscaban un milagro para octubre. Me senté en  la última fila, esperando no incomodar a nadie,  pues hace tiempo me declaré errante de las tradiciones cristianas, pero como niña criada en colegio católico aprendí que la casa de Dios siempre esta abierta para cualquiera que necesite cobijo. Acomode mi bolso y  observé  la pintura, aquella historia que tuve que aprender para mi nota del tercer bimestre del curso de religión, la imagen pintada por un mulato y la canción  que ya mi mente no recuerda.
Después de maravillarme con el atrio, observé mi entorno, las diferentes subculturas de Lima que se reunían ante un sola fe,  muchos ingresaban  a la espera de un milagro o  agradecer los ya concedidos; recuerdos muchas  viejecitos arrodillados rezando fervorosamente en silencio,   otras acercándose lo más posible a la imagen llevando algún rosario en las manos, un ambulante que acomodando sus golosinas  para el día siguiente y algunos niños  que corrían aburridos. Entonces me puse a pensar en que era un milagro, según la REA es un hecho no explicable por las leyes naturales y que se atribuye a intervención sobrenatural de origen divino o es buscar que algo que es imposible  que se realice, para mí un milagro es la propia voluntad humana capaz de mover  los destinos el mundo con solamente quererlo. No creo en Dios, pero sí, en un milagro, algunos cristianos me pueden señalar como cobarde por no inclinarme ante Él y ante su posible majestuosidad; pero es más difícil no creer,  pues no pienso en mi destino como escrito, ni veo mi existencia con un plan divino, solamente considero la vida como un milagro, propia de una creación misteriosa,  pero creo fielmente que la compasión, solidaridad y amor a los semejantes podrán  ayuda a cambiar la sociedad.

Sin embargo,  me acerco cada año  a la iglesia de las Nazarenas a la espera de un milagro...

martes, 18 de octubre de 2016

Miedo

María vio la luz, un día frío de agosto, la primavera se veía lejana y su mirada disimulaba su dolor. Tenía miedo a la oscuridad pero temía quedarse quiete y esperar el próximo golpe. Recorrió la habitación buscando un espejo  y al verse suspiró...
- Tú no vivirás lo mismo que yo-  dijo a su bebé.
Salio y saludo a su suegra que con un gesto de admiración le preguntó.
-¿A dónde vas?- 

Pero María balbució  una escusa y se fue para nunca más regresar...

jueves, 1 de septiembre de 2016

EL Cuarto

Juan regresó a su departamento a la medianoche, está cansado se sentó en su cama. Observó por su ventada la solitaria calle, esperando escuchar un susurro o ver una sombra. Y así paso toda la noche, encerrado en su soledad y con las ansias de verla. Entonces el tiempo perdió sentido y su locura se convirtió en su realidad.
-¿María eres tú? - preguntó
Y creyó escuchó una voz tan dulce desde la penumbra. 
-Me han dicho que te fuiste... pero no lo creo- dijo nervioso. 
Contempló su habitación esperando una respuesta.  Pero después de algún tiempo siguió.
- No tengas miedo...-
La fría madrugada comenzaba y él  esperó. Durante horas miró la penumbra. Y en algún momento se durmió y soñó con María.
Sin embargo,  al despertar vio al casero parado en la puerta,  le dijo.
- Joven  lamentó la pérdida de su esposa... muy buena mujer pero aún me debe dos meses-
 -No se preocupé le pagaremos en dos días, ni yo ni María nos iremos-